Domingo 15 Diciembre 2013
Retomamos la ruta del Ter donde la
dejamos: en Sant Juan de les Abadesses
(778m alt.)
Ruta esta que en la primera parte entre
San Juan de las Abadesas y Ripoll no hay ningún tipo de complicación ya que se
pasa por el trazado de la extraordinaria vía verde de la Ruta del Hierro, esta
denominación se le da a uno de los múltiples ferrocarriles industriales que
históricamente se desarrollaron en los márgenes del río Ter para Poner en
comunicación las comarcas Pirenaicas con el litoral de la Costa Brava. Perfectamente
acondicionada nos rescata el antiguo Recorrido del ferrocarril minero que unía
Ripoll, San Juan de las Abadesas, y Toralles con las generosas minas de carbón
de Ogassa (Girona).
El segundo tramo entre Ripoll y la Farga
de Bebié, se tiene que tener cuidado con el tráfico rodado ya que pasa por
algunos tramos de la carretera C-17.
Mañana bien fresquista y agradable paseo
por la Ruta del Hierro, eran las
9,00 horas y nos quedaban unos 9,3 km para llegar a Ripoll. Pasamos junta a la fuente Nova se encuentra en un lugar
sombrío, con un precioso decorado forestal cubierto por una capa de escarcha tanto
en la superficie del terreno como en las copas de los árboles se dibujaban unas
bonitas imágenes invernales… mientras nuestros pasos crujían sobre el hielo que
persistía en las zonas de umbría
Con más pena que gloria llegamos a una de
las poblaciones más importante y cuna de Catalunya Ripoll. Cruzamos el Ter por el puente metálico que hay al lado del
Centro de Acogida Turística. Nos encontramos nada más entrar con el patrimonio
cultural vinculado al uso del agua del Ter, el lavadero de Can Polit situado a
la derecha de curso del rio y emplazada en el canal de Can Guetes. En el otro
lado, la antigua colonia de Estamariu
Ripoll
está situado a 690 m. de altitud, es la capital
de la comarca del Ripollés, en la confluencia de los ríos Ter y Fresser.
Fue fundado en el 888 por el conde Guifré
el Pilós, dentro de la regla benedictina.
En el 977 el conde Oliva Cabreta construyó una iglesia de cinco naves en
estilo románico, y su hijo el abad Oliva, lo consagró en 1032.
Tras callejerar llegamos a la Pl. del
Abad Oliba donde su principal atractivo turístico es el Monasterio de Santa
María. Románico, historicismo S-XI, XII,
XIX
Seguimos con el itinerario marcado
teniendo que cruzar el Ter por uno de sus puentes en los que se puede apreciar
una estampa de la ciudad que me recuerda, en escala pequeña, a Girona. Se llega
a las inmediaciones de la estación ferroviaria donde se observa sobre un
pedestal la locomotora 281.006 que
presto servicio en la línea de Ripoll a Puigcerda
No hay comentarios :
Publicar un comentario