23/04/2017
La Riera de Merles es una de las mas importante que transcurre por el
Lluçanès, que pasa por las comarcas del Ripollès, Berguedà, Osona, y el Bages.
En esta ruta podremos contemplar bellos saltos de agua y peculiares pozas. En cuyas rocas erosionadas por el paso de los
años se forman curvas caprichosas que son digna de ver. Durante
el recorrido a través de un camino de gran atractivo y belleza, visitaremos el
núcleo urbano mas pequeño de Cataluña.
Para llegar al punto de salida hay que
coger la C-17 hasta la entrada de Ripoll, girando seguidamente a la izquierda
para coger la C-26 dirección Berga hasta
el km 174, donde cogemos la pista con dirección al camping “El Saiol,” pasado
este encontramos un puente de madera, sobre la riera de Merle “ Pont el Solà
“ seguidamente un poste con indicación
hacia “La Riba”, punto que hemos escogido para iniciar la caminata. (Hay una
explanada donde se puede dejar cómodamente el vehículo).
Todo el camino se hace por pistas
forestales , pero no todas las pozas y saltos están indicados, con lo que
es fácil saltarse alguna de estas
opciones (mejor ir acompañado con alguna reseña). teniendo en cuenta que no están
marcados, excepto algunos que tienen a pie de pista una señal de pintura azul
muy deteriorada y que puede no ser vista.
Empezamos a caminar por la pista
sementada con dirección Riba, nos encontramos con la masía El Sola, este primer
tramo coincide con una vía ganadera “Ruta de la Trashumancia”, seguimos por la
pista
Tenemos el primer contacto con el arroyo
que en este tramo, se denomina Rec de la Riba, La primera parada es en el Gorg
Rodon y la segunda, un poquito más arriba, el Gorg Negre, Estos saltos y pozas
de aguas cristalinas son ideales en verano para darse un chapuzon
Encaramada sobre una colina encontramos
San Esteban de la Riba, es una iglesia de estilo románico del municipio de las
Llosses, el edificio actual es del siglo XII, fue restaurado en el siglo XX, se
encuentra anexa al Mas La Riba casa de payés del siglo XV
En este punto termina la pista cementada
, que se transforma en pista forestal. Hacia la derecha sigue la Ruta de la
Trashumancia. Pasamos a poca distancia
del Moli de la Riba , muy bien
conservado, restaurado recientemente, un poco mas adelante a la derecha del
camino y al abrigo de la pared rocosa, por la que en esta ocasión brota un
tímido hilo de agua del interior de la
montaña, formando la Font del Pantano.
Una vez cruzado el arroyo está el pequeño pantano de la Riba, que
servía para recoger el agua que luego era canalizada para mover los mecanismos
del molino.
En este nuevo desvió y tras una corta
bajada encontramos a mi parecer uno de los rincones mas bonitos de la ruta, y que lo forma
el Gorg de Caselles .
El camino va ganando altura de forma gradual
pero constante. encontramos en esta parte del camino un panel informativo, el
cual prohíbe algunas actividades, como por ejemplo el fuego, ya que es un
espacio natural protegido de la Riera de Merles. Dejamos la pista para girar
hacia la derecha por un camino que nos lleva a el “Gorg del Prat” que toma el nombre de la Masía de El Prat que
se encuentra a pocos metros, y a la izquierda del camino. Actualmente es un
establecimiento de turismo rural.
Salimos a una nueva pista, la seguimos a
la derecha pasando junto a la masía Cal Cintet, y que nos lleva a la carretera
asfaltada que va hacia la Pobla de Lillet, seguimos hacia la izquierda hasta llegar a la población de.
Sant Jaune de Frontanyà:- Pequeño núcleo
urbano menos poblado de Cataluña, es literalmente un pueblo de dos calles que
se halla bajo la protección de Bien de Interés Cultural y donde su elemento más
visible del Románico Catalán del S-XI es su iglesia. Situada junto a la iglesia
la fuente de la Mola (Está hecha a base de una piedra de molino (concreta mente
del Molino de Terradelles)
Desde la población seguimos las señales
blanca/rojas del GR-241 que pasa por
las inmediaciones del restaurante Casablanca, continuando por la pista pues
todavia nos quedaban por disfrutar de algunos saltos , como el Gorg del Matxo y
el Gorg Blau aunque hemos dejado algunos sin visitar.
En
ruinas y casi tapado por la vegetación se encuentra el Moli de la Moreta, cerca
de mismo una pequeña poza que lo
abastecía de agua para su funcionamiento . Cerca de aquí confluyen el Rec de la Riba con la Riera del Molino, dando
origen a la Riera de Merlès.
En un evidente cruce de pistas dejamos el
GR-241 que nos había conducido hasta aquí, este gira hacia la derecha, pero
nosotros continuamos por la pista de enfrente en la que sobre un árbol hay
pintada una cruz amarilla que prohíbe seguir las señales de este color.
Este nuevo tramo sobre la riera de Merles nos deja en el punto
de inicio de la ruta dando por finalizada la misma.
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